
“EL GRAN MANDAMIENTO Y EL AMOR AL PRÓJIMO”
“Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra”.
Efesios 6:1-3
Ben Sirá o Hijo de Sirá fue un prominente maestro judío de Jerusalén que vivió alrededor del año 180 AC. Este hombre, preocupado por la influencia de la cultura griega que no cesaba de expandirse sobre las costumbres y tradiciones judías, estableció una escuela para educar a los jóvenes en la aplicación de las Escrituras a la vida diaria del pueblo. Aunque sus escritos no son considerados como inspirados y no se encuentran en nuestra Biblia, respecto al amor por los padres, con toda verdad y apego a las Escrituras dijo lo siguiente:
“El Señor quiere que el padre sea honrado por sus hijos,
y que la autoridad de la madre sea respetada por ellos…
El que honra a su madre reúne una gran riqueza.
El que respeta a su padre recibirá alegría de sus propios hijos; cuando ore, el Señor lo escuchará.
El que honra a su padre tendrá larga vida; el que respeta a su madre será premiado por el Señor, pues obedece a sus padres como si fueran sus amos.
Hijo mío, honra a tu padre con obras y palabras,
y así recibirás toda clase de bendiciones.
Porque la bendición del padre da raíces firmes a una familia,
pero la maldición de la madre la arranca de raíz.
No te sientas orgulloso viendo a tu padre pasar vergüenza,
pues esto no es ninguna honra para ti.
El honor de un hijo está en el honor de su padre;
en cambio, el que desprecia a su madre se llena de pecados.
Hijo mío, empéñate en honrar a tu padre;
no lo abandones mientras tengas vida.
Aunque su inteligencia se debilite, sé comprensivo con él;
no lo avergüences mientras viva.
Socorrer al padre es algo que no se olvidará;
será como ofrecer sacrificio por los pecados.
Cuando estés en aflicción, Dios se acordará de ti
y perdonará tus pecados… El que abandona a su padre ofende al Señor…” (Libro de Sirácida 3:1-16)
Hoy, con tristeza y dolor vemos un cuadro social que tiende al abandono de los ancianos y muchos hijos han dejado de honrar a sus padres. La gran pregunta del día es: ¿Como cristianos nos dejaremos arrastrar por esa influencia o como Ben Sirá levantaremos nuestro amor? Veamos en este día cómo podemos cumplir con el Gran Mandamiento:
Miami, 23 de febrero 2020. Mes del Amor