
NAVIDAD ES, FE EN LAS PROMESAS DE DIOS
“NAVIDAD ES, FE EN LAS PROMESAS DE DIOS”
“Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor.” Lucas 1:45
Cuando miramos detenidamente los diferentes cuadros y personajes de la Navidad nos damos cuenta que ella es el cumplimiento de la fe en las promesas de Dios. Mucho tiempo antes del nacimiento de Jesús unos hombres sabios del Oriente tal vez creyeron en la promesa de Isaías 9:6,7: “Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto.” Y por fe emprendieron el largo, costoso y riesgoso camino en busca de la bendición. Una jovencita llamada María creyó las palabras del ángel Gabriel: “Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS.” (Lucas 1:31) y basada en esa fe enfrentó el desprecio y hasta la misma muerte: “Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra…” (Lucas1:38) Por la fe también José creyó la promesa que le dijo el ángel: “Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.” (Mat 1:21) Y recibió a María por mujer sin importar lo que dijeran de él, pagando un gran precio por su decisión. Por la fe los pastores de Belén dejaron sus rebaños abandonados para ver el cumplimiento del anuncio recibido: “Sucedió que cuando los ángeles se fueron de ellos al cielo, los pastores se dijeron unos a otros: Pasemos, pues, hasta Belén, y veamos esto que ha sucedido, y que el Señor nos ha manifestado.” (Lucas 2:15)
¡Sin fe es imposible agradar a Dios y ver su gloria! Los magos, María, José, los pastores, Elizabeth, Simeón y Ana creyeron, sufrieron por su fe y vieron la Gloria de Dios.
Elizabeth, mujer de Zacarías el sacerdote y futura madre de Juan el Bautista, le dijo a María: “bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor.” (Lucas1:45) y esa fe de María la llevó a alabar al Señor por Sus bendiciones hacia ella, porque, Navidad es eso. ¿Por qué alabas al Señor en este día? ¿Por qué motivos te unes a María y declaras “Engrandece mi alma al Señor; Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador”? Fe, bendiciones y gratitud, ese es nuestro tema navideño para hoy. Amén.
Miami, 15 de diciembre, 2019 Mes de la Navidad